Hoy vengo dispuesto a zanjar cuentas pendientes. No se asusten, la cosa no va con nadie, … de momento. Me refiero a cuentas pendientes de este blog con los que lo han seguido desde el principio, y con las soluciones al turismo como sector económico en Isla Cristina.
La verdad es que escogí hablar del turismo porque me parece que es una actividad en la que podemos reflejar las fortalezas y debilidades de otros sectores como la hostelería y el comercio, profundamente relacionados con la actividad turística.
Vayamos al grano.
Soy de los que piensa que a veces los problemas más complicados tienen soluciones sencillas, que tendemos a enredar demasiado las cosas cuando bastaría con hacernos las preguntas adecuadas.
Talvez sea por deformación profesional. Cuantas veces algún repartidor ha llegado con la moto averiada soltándome un discurso de mecánica, que si la bujía, que si el carburador, que si chiclés, ruido de segmentos …, tras escucharlo siempre hago la misma pregunta ...Empecemos por el principio....¿te has acordado de echarle gasolina?. Les sorprendería la de veces que acierto. En un análisis correcto va la mitad de la solución.
En Isla Cristina llevamos planteando el desarrollo turístico desde que tengo uso de razón y el hecho es que hemos avanzado poco en algunos aspectos y hemos retrocedido en muchos, porque Nunca ha habido un planteamiento serio del turismo como recurso económico o al menos yo no conozco ninguno.
De hecho, diría que se ha confundido desarrollar el turismo con construir más viviendas y talvez pensando más en la financiación del ayuntamiento con la venta de suelo y … en otros menesteres, que en hacer de la industria turística una alternativa seria como generadora de empleo y riqueza más allá de los meses de julio y agosto.
Un planteamiento bastante pobre a mi entender, sobre todo porque aquellos que nos quieren vender “futuro” no ven más allá de las próximas elecciones. Padecen lo que yo llamo “miopía política”, por desgracia un mal muy extendido entre los políticos profesionales de todas las siglas y que aumenta con la edad; cuanto más años en política llevan más miopes se vuelven con el interés general, y curiosamente, desarrollan una vista de águila para el interés propio. Sobre todo cuando les toca gobernar. Algo digno de estudio.
Como en todo supongo que habrá excepciones aunque tengo la impresión de que cada vez son menos frecuentes.
En fin, no nos desviemos del tema, lo cierto es que las políticas simplistas de construir viviendas sin criterio y basando el turismo solamente en sol y playa son más propias de las películas de Esteso y Pajares en los 70 que del siglo XXI.
Cualquier planteamiento que se haga sobre el desarrollo turístico debe partir del enfoque de satisfacer las necesidades del cliente, en este caso el turista, dándole al turista lo que le gusta y satisface, dentro de nuestras capacidades; y no pretender que traguen por lo que nos gusta o satisface a nosotros o al “personaje” de turno.
Entremos en materia, como decía antes, me gusta plantear los problemas con razonamientos sencillos (que no simples), si lo que pretendemos es atraer al turismo parece obvio que la primera pregunta que deberíamos hacernos es:
1. ¿Qué busca, qué le gusta hacer al turista cuando va de vacaciones?
Bueno, como la intuición a veces engaña y para evitar ideas preconcebidas será mejor que le preguntemos a los que saben de esto. Y quién mejor que el Instituto de Estudios Turísticos. Según ellos estas son las actividades más realizadas por los turistas durante sus vacaciones.
Estas son las más importantes de mayor a menor:
Compras / ver escaparates 72,8 %
Visitas culturales 57,4 %
Pasear 56,3 %
Salir a comer 55,8 %
Disfrute y uso de la playa 40,8 %
Salir de copas 37,4 %
Espectáculos culturales 20,8%
Deporte 14,5 %
Sorprendente, ¿no?
Creo que podemos sacar la conclusión de que, aunque es cierto que el turismo de sol y playa es importante (40,8% de los turistas) y hay que hacer esfuerzos por mantenerlo, también es cierto que si nos basamos sólo en esto estaremos renunciando al 60% restante que nos pide algo más.
La playa no es la primera actividad en importancia, ni siquiera la segunda, es la 5º actividad en importancia, sobre todo porque tiene el handicap del clima y está muy limitada al Julio y Agosto. Sin embargo resulta curioso que las actividades que más hacen los turistas en sus viajes se puedan hacer en cualquier época del año: comprar, pasear, salir a comer y las visitas culturales.
¡Vaya!, a ver si ahora va a resultar que invertir en cultura es rentable y que puede generar turismo todo el año, que ayudar al comercio y crear infraestructuras comerciales no sólo genera riqueza y empleo sino que además puede hacer crecer el turismo, y que fomentar la hostelería y no poner impedimentos a terrazas ni colocar contenedores de basura junto a ellas también podría ayudar al desarrollo turístico.
Parece que ya hemos conseguido averiguar lo que un turista hace en sus vacaciones y creo que podemos decir sin miedo a equivocarnos, que el apoyo a la cultura y a las actividades comerciales y hosteleras produce sinergias en el crecimiento turístico.
Siguiendo este razonamiento sencillo, la siguiente pregunta en esta secuencia lógica sería:
2. Si ya sé lo que quiere mi cliente, ¿cómo puedo dárselo con los medios que tengo?
Para no aburriros, creo que vamos a dejar esta respuesta para la semana que viene, me he puesto a escribir y se me ha ido la mano, 18 páginas en total. Voy a tener que reducirlo o publicarlo por capítulos.
Un saludo y hasta la semana que viene.
Esto es sólo MI OPINIÓN, que, aunque creo que está bien fundamentada, no es una verdad absoluta, cualquier comentario que aporte alguna perspectiva nueva es sinceramente bienvenido. Os animo a comentar y participar en un debate, a ver si entre todos sacamos algo en claro.
NOTA: Datos obtenidos del Informe Anual 2009 del Instituto de Estudios Turisticos dependiente del MINISTERIO DE INDUSTRIA, TURISMO Y COMERCIO.